Ovos Corazón de Galicia, una empresa que se sitúa en Chantada (Lugo), nace en 2023 y cuenta con la certificación del Craega. Roberto López, el impulsor de este proyecto, nos cuenta en esta entrevista todos los detalles sobre la iniciativa y comparte su opinión sobre la producción ecológica.
¿Cómo nació este negocio y en qué año?
Este negocio nació en 2017. Montamos la granja para una integración y en 2023 nos salimos e intentamos hacer nosotros nuestra propia distribución y nuestra marca.
¿Cómo es un día normal en vuestro trabajo?
Un día normal en nuestro trabajo es un día muy largo, porque hay que venir, recoger, soltar a las gallinas, volver por la tarde a meterlas, clasificar, y aparte de eso somos un poco valientes y decidimos hacer nosotros el reparto a las tiendas directamente, para que no llegue el huevo roto y no haya problemas.
¿Hasta dónde llegan vuestros huevos? ¿Dónde y cómo se pueden comprar?
Nuestros huevos están en las tiendas físicas pequeñas de ecológico. En Galicia intentamos llegar hasta donde podemos, y el resto hay que intentar venderlo igualmente.
¿Siempre produjisteis en ecológico, desde los inicios? ¿Cómo surgió esta idea?
Sí, desde los inicios siempre producimos en ecológico. Desde 2018 estamos certificados con el Craega.
La idea inicial no era esta, sino que iba a hacerse una granja dedicada al vacuno, pero por circunstancias nos ofrecieron montar esto y tiramos hacia adelante, en ecológico.
¿Por qué es importante tener la certificación del Craega? ¿Qué beneficios os aporta?
La certificación del Craega vale para todo, principalmente para defender lo que queremos y lo que tenemos aquí. En Galicia podemos tener todo ecológico, sin ningún problema. A la hora de llegar a las tiendas, al llevar el sello del Craega, no hay mucho más que decirles. Todo lo que tenga el sello del Craega, lo admiten.
¿Qué tienen de especial los huevos que se producen en ecológico? ¿Cuáles son las diferencias con los convencionales?
La diferencia de un huevo ecológico con uno convencional o con uno campero es que aquí no se les puede dar medicamentos ni nada a las gallinas. Si baja la puesta, lo mejor que tenemos es que estén fuera, que coman el pasto, no se les puede hacer nada más. Ahí está la diferencia del huevo. A veces tenemos problemas con esto porque la yema es más clarita y la gente dice que es muy clara, pero esa es la realidad del huevo ecológico y la diferencia.
¿Tenéis barreras que os dificulten el trabajo diario con el tema de producir en ecológico o las tuvisteis en algún momento y conseguisteis superarlas?
Realmente el problema del ecológico es un poco el consumidor, porque piensan que lo que tienen en casa es mucho mejor que lo que está realmente certificado.
Yo tengo los huevos de casa y no pasan las certificaciones, no pasa el veterinario de la Xunta de Galicia, no pasa nadie. Tenemos que intentar cambiar la mentalidad de la gente en ese sentido.
¿Cómo se podría intentar convencerlos?
Es complicado, sobre todo con la gente mayor. La gente más joven sí que lo entiende y sí que lo ve.
¿Hay algo que os gustaría que mejorase en el proceso de obtención de la certificación?
No, la certificación está bien. Hay unas leyes y hay que cumplirlas. Ya no es cumplir las leyes, es que para que sea ecológico, se tiene que hacer así.
¿Por qué la gente debería consumir productos ecológicos?
La gente debería consumir productos ecológicos para cuidar su propio cuerpo, todo lo que metemos para dentro somos nosotros. Todo empieza por la alimentación.
“La gente debería consumir productos ecológicos para cuidar su propio cuerpo”
¿Qué consejo le darías a alguien que quiere empezar un proyecto en ecológico o que ya lo tiene en convencional pero quiere pasarse al ecológico?
Que lo vea como algo en lo que cree, no como un negocio.
¿Cuáles son vuestros planes a futuro? ¿Mejorar, mantenerse como estáis, cambiar en algo…?
Nuestros planes de futuro serían poder crecer un poquito y mejorar en el sistema de logística: intentar ir todas las semanas a las tiendas, y no semana sí y semana no, pero es complicado. Siendo solo dos, es muy difícil llegar a todo.