La Comisión Europea (CE) propone aplazar un año la entrada en vigor del nuevo reglamento de producción ecológica. Si la prórroga se aprueba, el estreno de la normativa se retrasaría hasta enero de 2022, es decir, un año después de lo inicialmente previsto.
El nuevo reglamento prevé la adopción de numerosos actos delegados y medidas de ejecución para especificar las normas técnicas vinculadas (producción ecológica, certificación en grupo o sistema de control ecológico).
En paralelo, la CE ha puesto en marcha una consulta pública (hasta el 27 de noviembre) sobre el futuro Plan de Acción para la agricultura ecológica. Enmarcado en el Pacto Verde Europeo, uno de sus objetivos prioritarios es conseguir que el 25% de la superficie agraria total de la UE sea orgánica.