Los hermanos Modesto y Martín Varela son los propietarios de Billó SC, una empresa familiar dedicada a la gestión de manzanos y castaños. Cuentan con la certificación del Craega desde los inicios de la explotación −alrededor del año 2006− gracias a su madre. El negocio evolucionó a partir de 2014, cuando comenzaron a automatizar algunos de los procesos. De cara al futuro, quieren seguir mejorando su productividad.
¿Cómo y cuándo surgió este proyecto?
Tal como lo tenemos hoy en día, en 2014. Ese año había muchas castañas en la explotación y se nos dio la oportunidad de comprar una máquina para recolectar. Entonces, empezamos a usar esa máquina y vimos que la cosa iba bien. Luego continuamos con el tema de los manzanos.
Gestionamos nosotros la finca, desde la plantación inicial, si es necesario, hasta la replantación, poda, recolección y limpieza. La finca está cuidada todo el año por nosotros. La mayoría de las manzanas se venden a Custom Drinks, aquí en Chantada.
«Gestionamos nosotros la finca, desde la plantación inicial, si es necesario, hasta la replantación, poda, recolección y limpieza.»
¿Cuál es tu historia personal?
Mi historia personal viene de muy atrás. En 2006 conseguí el título de ingeniero técnico industrial y estuve trabajando fuera 14 años, diseñando máquinas y eso. Después surgió esto, cuando compramos la máquina de castañas y la cosa empezó a mejorar. En 2022 ya me di de alta como autónomo y nada, aquí seguimos con la explotación, a ver si sigue funcionando bien.
¿Trabajáis en ecológico ya desde el principio?
Sí. La explotación ya viene en ecológico desde mis padres. Mi madre era la que estaba a cargo y se dio de alta alrededor de 2006. Esto fue más bien para la venta de castañas, porque teníamos entre 5.000 y 6.000 kg en casa.
¿Tenéis barreras que os dificulten el trabajo diario o habéis conseguido desarrollar un método de trabajo efectivo?
Las barreras que encontramos ahora en el medio rural son principalmente la mano de obra. Nosotros tuvimos que hacer una fuerte inversión en maquinaria y colaboramos con una empresa de servicios que nos ayuda, además de los trabajadores que somos nosotros, porque si no, sería inviable recoger la cantidad que recogemos.
¿Por qué la gente debería consumir productos ecológicos?
Yo creo que eso está bastante claro. El consumo de productos ecológicos te garantiza no ingerir cosas que no sabes cómo están, que vienen de fuera y que pasan sin control. Por lo tanto, es importante consumir en ecológico por salud: sabes lo que estás comiendo y está certificado por un consejo regulador, que hace controles y revisiones. Conoces la trazabilidad.
¿Qué beneficios os aporta contar con la certificación del Craega?
Los beneficios son relevantes: el precio es mayor y el prestigio también; no es lo mismo trabajar en convencional que en ecológico. Además, tenemos el control: vienen a revisar, te hacen una gestión de la explotación… es decir, tú les comentas lo que quieras y ellos te ayudan.
¿Hay algo que os gustaría que mejorase o cambiase en el proceso de obtención de la certificación?
Hacemos la recertificación cada cierto tiempo y en principio, nosotros con el Craega siempre bien, no tenemos ningún problema. La certificación inicial ya la hizo mi madre en su momento; esta es una explotación traspasada, pero son bastante claros en el tema de la documentación y eso, no suele haber problema.
¿Qué crees que podría atraer a agricultores convencionales a lo ecológico? ¿Qué se debería hacer para que la gente conociera un poco más este mundo?
Eso creo que es una cuestión personal, porque si alguien quiere recoger más manzanas y las trata, posiblemente tenga más cosecha. Sin embargo, la producción ecológica te da otras ventajas. Depende de lo que priorice cada uno.
¿Cuáles son vuestros planes a largo plazo? ¿Queréis cambiar algo, mejorar, manteneros como estáis…?
Los planes a largo plazo son mejorar la productividad, gestionar las fincas lo mejor posible e intentar que el cliente esté contento con nosotros, porque nosotros gestionamos la finca y al final lo que hacemos repercute directamente en el cliente. Entonces, a largo plazo, seguir con estas fincas, tratar bien a la gente y seguir trabajando como lo hemos hecho hasta ahora.